Con poco tiempo para comenzar de manera oficial la pre-temporada de la NFL, ya tenemos una de las mayores bombas del mercado a nuestra merced: los Denver Broncos adquieren a Russell Wilson, quarterback estrella de los Seattle Seahawks, en un intercambio que dará como compensación dos selecciones de primera ronda, dos selecciones de segunda ronda, una selección de quinta ronda, QB Drew Lock, TE Noah Fant y tackle defensivo Shelby Harris para el equipo de la división Oeste de la conferencia Nacional.
Luego de que los Green Bay Packers confirmaran la renovación de su lanzador estrella Aaron Rodgers por los próximos cuatro años y una cantidad cercana a los $200,000,000 millones de dólares, los Broncos necesitaban asegurar el quarterback de élite que tanto necesitaban y no dudaron en apretar el gatillo para hacerse con Wilson.
Tras varios años de rumores sobre el fin de su etapa en Seattle e incluso con el mismo head coach del equipo Pete Carroll declarando a los medios recientemente que la franquicia no tenía intenciones de mover a su estrella, finalmente los Seahawks darán tanto a Wilson como a ellos mismos, un nuevo inicio. Con el paquete de selecciones y jugadores que recibieron, además de liberar de su espacio salarial los $35,000,000 millones de dólares que representaba el contrato de Russell, ahora pueden reestructurar su equipo para el futuro de una manera mucho más libre.
Por parte de los Broncos, vuelven a tener en su plantel un QB con una ilustre carrera y seguramente un puesto en el Hall of Fame desde Peyton Manning, quién tuvo un periodo exitoso con Denver desde 2012 hasta su retiro en 2015, llegando a dos Superbowl’s, perdiendo el primero en 2013-2014 ante el mismo Russell Wilson y los Seahawks, para luego coronarse campeón en la 2015-2016, venciendo a los Carolina Panthers.
Ahora, Wilson puede volver a llevar el camino de Manning en su propio estilo y dentro de una era que lo ha visto consagrarse como uno de los QB más exitosos con nueve selecciones al Pro Bowl y siendo uno de los jugadores mejor pagados de la liga. Denver solo necesitaba alguien que pudiese conducir al equipo en la ofensiva pues cuenta con una de las plantillas más completas de toda la NFL.
La lista de pretendientes para Wilson era larga, incluyendo a los recientemente transformados Washington Commanders, quiénes habían estado preparando una mega oferta por el QB, sin embargo, los Broncos siempre fueron uno de los destinos más tentadores para el veterano de 33 años. Además, era una de las pocas franquicias con el espacio salarial necesario para tomar el contrato de la estrella sin problemas ($42,000,000 millones de dólares previo al cambio). También se ha reportado que como parte del trato, Denver daría una nueva extensión a su jugador recién adquirido, pero no ha habido confirmaciones al respecto hasta el momento.
En su última temporada con los Seahawks, Wilson tuvo marca de 6-8 con 259 pases completados en 400 intentos para un 64.8% de efectividad, acumulando también 3113 yardas y 25 touchdowns en un total de 14 partidos disputados. Para completar su línea den 2021-2022, tuvo seis intercepciones, un promedio de 7.8 yardas por intento, 12 yardas por pase completado y un rating de 103.1.