Cristian Gonzalez
Algo que muchos nos saben sobre la cultura Lowrider es que tiene sus inicios como una manifestación cultural chicana (cultura mexicana-estadounidense): es directamente la huella de México dentro de los Estados Unidos. Todo esto de los Lowrider surgió por primera vez aproximadamente en la década de los 40.
La historia de la cultura Lowrider en América
Dentro de la cultura americana estadounidense del consumo se ve con frecuencia que las personas de clase media suelen cambiar de automóvil constantemente, pues para ellos los autos envejecen rápidamente así que los cambian por modelos nuevos.
Ahí es cuando entran los inmigrantes mexicanos que toman estos autos que son «modelos viejos», los tunean, y de paso expresan su creatividad a través de estos autos rechazados socialmente.
Esta expresión cultural fue permeando también la cultura afroamericana y otras que existen dentro de los Estados Unidos y consiste en modificar coches clásicos como parte de un estilo de vida, que llevan consigo la expresión del estilo de vida y una forma de manifestarlo ante la sociedad a modo de mostrar la creatividad personalizada y de identidad cultural latina dentro de los Estados Unidos.
¿Cuáles son las características de los Lowriders?
- Suspensiones bajas
- El uso de pinturas en tonos brillantes
- La instalación de “pumpers”, el sistema que permite modificar la altura de cada extremo de los ejes del coche
- Elementos cromados en las parrillas y detalles
- Potenciación –o cambio completo- del motor
- Uso de neumáticos más grandes y anchos que los de fábrica.
Entonces modificar un auto que ha sido rechazado, para mejorarlo y hacerlo incluso más llamativo de lo que era anteriormente se convierte en un ejercicio de superación social para la comunidad chicana/latina.
Durante la década de los 70 se podría decir que fue la de mayor apogeo, que se conectó con lo que diez años después, surgiría el nacimiento de la cultura hip hop quienes adoptaron el estilo de los Lowriders chicanos, mezclándose con la cultura afroamericana en plena época de de los 80s, quienes lo usaron como imagen de prestigio y respeto que fue asimilada paulatinamente.
En esa misma época cuando la cultura Lowrider llegaron a Los Ángeles y Nueva York, ciudades donde el hip hop estaba consolidándose de una manera peculiar.
Es así como el tuning en los autos olvidados por los estadounidenses se convierte en un coche perteneciente a la cultura Lowrider chicano que busca mantener la identidad de la comunidad latina y de paso hablar sobre la superación que se enfrenta en el diario vivir en una tierra hostil que no es del todo propia.
