Pedro Oliveira
En el mes de Noviembre de 2021, una investigación empezó por parte de la NBA dentro de la franquicia Robert Sarver, dueño de los Phoenix Suns alegando que el ambiente laboral creado por él y sus principales allegados dentro de la organización era uno de los más tóxicos e incorrectos de toda la liga. Desde entonces, más de 300 personas han sido entrevistadas acerca de los hechos ocurridos en el equipo desde que Sarver compró la franquicia en el año 2004.
Entre las principales palabras que se recaudaron para describir la realidad de trabajar dentro de la organización están las palabras »misoginia» y »racismo» como principales adjetivos, además de ser muchas veces catalogado como un »ambiente de trabajo hostil y tóxico»’en las informaciones obtenidas tanto de actuales empleados como aquellos que estuvieron en el pasado.
La empresa jurídica de Watchell Lipton es quién lleva el mando en la investigación iniciada por la NBA, con previa experiencia en cubrir situaciones similares, habiendo llevado operaciones con Los Angeles Clippers y los Atlanta Hawks en el pasado. Todos los interrogatorios llevados por la firma han confirmado ciertas alegaciones hechas en contra de Sarver y además, han agregado evidencia en documentos como mails de la empresa.
La liga y el comité de investigación ya están en una etapa de finalización sobre el caso, quedando como última instancia un interrogatorio con el mismo Robert Sarver para definir toda la evidencia recolectada y seguir con el proceso correspondiente dependiendo de lo que delibere la NBA como adecuado concorde a la gravedad de la información y pruebas obtenidas.
Por su parte, la franquicia de los Suns además de dar acceso total a todos los documentos y comunicaciones posibles entre empleados los últimos años, también ha liberado a sus anteriores empleados de acuerdos que les impiden compartir información de su estadía en la franquicia legalmente. Sarver en el momento de hacerse pública la investigación declaró en varios comunicados su negación ante las acusaciones.
Específicamente algunas de las cosas que han servido de acusación hacia el empresario americano son el uso de términos racistas con sus empleados, discutir asuntos sexuales de manera explícita en la oficina, interferir en relaciones sobre la cancha y multiples abusos verbales. Algunos incluso llegan a pasar de su persona, con teorías sobre la esposa de Sarver enviando mensajes amenazantes o intimidantes a ex-empleados de los Suns.
La franquicia de la WNBA, Phoenix Mercury, también forma parte de la investigación al ser propiedad de Sarver. Probablemente veamos el final de esta saga más pronto de lo esperado. Los Suns han sido una de las franquicias más exitosas en las últimas temporadas de la NBA, habiendo perdido las finales del torneo la campaña pasada en seis juegos ante los Milwaukee Bucks, y teniendo el mejor récord entre todos los equipos con 50 victorias (único hasta el momento en alcanzar la cifra) y solo 12 derrotas.
