Pedro Oliveira
La estrella de los New York Knicks, Julius Randle, volvió a formar parte de un altercado sobre la cancha en esta temporada. En la derrota de los Knicks ante los Phoenix Suns el pasado sábado, el ala-pivote de 27 años tuvo una discusión con el alero Cameron Johnson al intentar buscar espacios en la pintura previo a un triple hecho por su compañero Evan Fournier.
Randle y Johnson empezaron a forcejear el uno con el otro incluso cuando los árbitro decidieron intervenir en la trifulca, y esta terminó cuando la estrella de los Knicks empujó al jugador de los Suns, también empujando al árbitro que estaba en medio de ambos en el proceso. Sus compañeros lograron separarlos pero no lograron evitar que Julius fuera expulsado por el resto del partido. Posteriormente se negó a cooperar con las autoridades de la NBA en la investigación del incidente, y finalmente fue multado por $50,000 dólares por su conducta en el partido.
En este momento los Knicks ganaban por un total de diez puntos con casi tres minutos restantes del tercer cuarto, pero Phoenix saldría victorioso gracias a un triple en los segundos finales anotado por Johnson para darle la victoria al equipo dirigido por Monty Williams, con un marcador de 115 a 114. Randle tuvo 25 puntos, siente rebotes y cuatro asistencias durante este encuentro.
Este incidente solo es uno más en la lista de aspectos negativos que han ocurrido con el egresado de la universidad de Kentucky, que han aportado a la preocupación de los Knicks de que potencialmente se convierta en una amenaza o separador de su núcleo joven de talento.
Llegando con sobrepeso durante la pre-temporada, el incidente con los fanáticos en el Madison Square Garden (donde Randle hizo un gesto de desprecio a la afición), sobre-posesión del balón al querer dirigir la ofensiva del equipo y rumores sobre un posible descontento con el ascenso de R.J Barrett como principal figura del equipo son algunas de las otras razones por las cuáles los el equipo de la Gran Manzana está reconsiderando el lugar de Julius en la franquicia.
Habiendo firmado un contrato de $117,000,000 millones de dólares por los próximos cuatro años, esto representa una escenario de pesadilla para los Knicks, quiénes tendrían que rebajar sus pretensiones si buscan canjearlo en la próxima campaña. Randle ha sido mucho más deficiente ofensivamente esta zafra, promediando 19.6 puntos en 41.6% de efectividad desde el campo y solo 30% desde la línea de tres (la temporada pasada promedió 24.1 puntos, en efectividad general de 45.6% y 41.1% en triples).
El equipo dirigido por Tom Thibodeau se encuentran en la décimo-segunda posición en la conferencia Este con un récord de 26-38 y a tres juegos y medio de la onceava plaza, los Washington Wizards, de esta manera estando casi eliminados de la posibilidad de entrar a la postemporada aún ganando la mayoría de sus partidos restantes. Un rotundo fracaso sabiendo que los Knicks fueron el cuarto mejor sembrado de la conferencia el año pasado.
Para agregar aun más a esto, los Knicks derrotaron a Los Angeles Clippers por 23 puntos durante el domingo, donde Randle tuvo una actuación para el olvido: solo cuatro tiros encestados de 16 intentos (10 puntos en total), ocho rebotes, cuatros asistencias en 29 minutos. Con el presente de los Knicks en una completa crisis, el futuro de Julius Randle parece estar más fuera que dentro de la franquicia.
