En el segundo día consecutivo de negociaciones entre la asociación de jugadores y el comité de los dueños de los equipos en las grandes ligas, nuevamente tuvimos progreso para encontrar una solución al lockout de la MLB, pero en cantidades mínimas. Siendo el lunes el día donde los dueños decidieron aumentar parcialmente su propuesta para convencer a los jugadores, estos últimos utilizaron el día martes para contra-ofertar dicho ofrecimiento.
La oferta dada por los dueños el lunes en resumen incluía un aumento en el presupuesto dado a los jugadores que entraban al proceso de arbitraje, yendo desde los $15,000,000 a los $20,000,000 millones de dólares y extendieron la nueva lotería del draft hasta la cuarta selección global.
En el caso de los jugadores, ellos pedían originalmente un pool para arbitraje que abarcara entre los $100,000,000 y $95,000,000 millones de dólares para el 80% de los jugadores elegibles tras sus primeros dos o tres años de servicio, y una lotería que abarcara hasta la octava selección global. En esta nueva contra-oferta, los jugadores no dieron cambios sobre las cifras dadas anteriormente pero si bajaron el porcentaje de elegibilidad al 75% (el porcentaje anterior implementado en la liga era alrededor de 22%).
Este es uno de los puntos más complicados de la negociación ya que la MLB se ha negado rotundamente al aumento drástico de este porcentaje. A cambio de esta reducción los jugadores pidieron un aumento más drástico aún en el salario mínimo global, empezando como base en la cantidad de $775,000 dólares con un aumento escalado de $30,000 dólares los próximos 5 años, dejando la cifra para el año 2026 en $895,000 dólares.
La exigencia anterior de parte de la unión de jugadores era una base de $725,000 dólares, haciendo esta propuesta algo aun más elevado de lo que se había conversado antes y que obviamente no es del agrado de la liga, quién había contra-ofertado con una base por los próximos cinco años en $630,000 dólares fijos o un inicio en $615,000 hasta los $725,000 en 2026.
La última modificación a la oferta hecha por los jugadores tiene que ver con la nueva lotería del draft de la MLB: de ocho selecciones a siente selecciones para la lotería, teniendo aún una diferencia de tres puestos con respecto a lo que ofrecieron los dueños.
Algo que a su vez los jugadores no mencionaron y pueden ser malas noticias, es que siguieron dejando de lado uno de los temas más importantes a nivel económico: los límites del espacio salarial y sus penalizaciones. Esto podría tomarse de la siguiente manera: la unión está esperando a que los dueños hagan una modificación a su última oferta, al considerar esta inaceptable para los estándares que se buscan dentro del nuevo acuerdo colectivo.
La diferencia entre ambas partes es de alrededor de $40,000,000 millones de dólares en su base, y más de $50,000,000 millones en cuanto a la escalación dentro de los próximos cinco años.
Sin duda alguna es bueno que las partes estén trabajando de forma consecutiva para encontrar una solución pero todo indica a que grandes progresos siguen por hacerse, con los temas del sistema de arbitraje, el luxury tax y la repartición de ganancias (tema qué tampoco ha salido a luz en estos últimos dos días) serán las barricadas más difíciles de derribar dentro de este proceso.
En un breve resumen de todas estas acciones recientes, se puede decir que tanto los jugadores como los dueños han estado »decepcionados» ante la falta de progreso de la parte contraria, por lo que el pesimismo de encontrar una oferta antes de la fecha límite impuesta el 28 de Febrero está cada vez más alto. Se espera que la MLB de respuesta a esta contraoferta el día de hoy, el tercer día de negociación consecutiva.