Tras la cancelación de las primeras dos series de la temporada regular en las grandes ligas a causa del MLB Lockout, no solo los jugadores y ejecutivos quedaron sin trabajo momentáneamente: quiénes desempeñan labores dentro y alrededor de los estadios, quiénes desempeñan funciones deportivas en menor escala (ojeadores, entrenadores de ligas menores, etc.) y muchos más dependen de que haya béisbol para poder ganarse la vida, y son la parte de la que menos se habla.
En la mañana de hoy la Asociación de Jugadores de la MLB anunció el lanzamiento de un fondo de ayuda para todos los trabajadores que fueron afectados por la primera cancelación de juegos realizada a principios de semana. Encabezados por el relevista de los St. Louis Cardinals Andrew Miller y el recién adquirido as de los New York Mets, Max Scherzer fueron los encargados de transmitir la presentación y planes del proyecto a los medios.
»Hay muchas personas que hacen a nuestro juego increíble. Muchos de ellos no se ven ni se pueden escuchar pero son vitales para el entretenimiento en la experiencia de nuestros partidos. Desafortunadamente también estarán entre los afectados por el lockout impuesto por los dueños y la cancelación de juegos por parte de la liga. Con este fondo, queremos hacerle saber que tienen nuestro apoyo.»
»La intención de este fondo es para apoyar a los trabajadores más afectados y quiénes han sido más dañados en su día a día por la presión que los dueños pusieron sobre los jugadores para aceptar un trato injusto.»
Andrew Miller y Max Scherzer, representantes de la Asociación de Jugadores de la MLB.
Ante los sucesos ocurridos este pasado lunes donde la unión de jugadores decidió rechazar la »mejor» oferta por parte del comité de dueños de la MLB, provocando así que el comisionado de la liga Rob Manfred cancelara la primera semana de temporada regular, todo el béisbol sufre un retraso que hasta el momento parece no tener solución pronta.
El fondo será manejado por la AFL-CIO (American Federation of Labor and Congress of Industrial Organizations), que representa la entidad más grande entre las uniones de los Estados Unidos.
»Seas un trabajador sobre el campo de béisbol o trabajando detrás de la escena, todos merecemos respeto y dignidad en nuestro trabajo. La unión laboral hará todo lo que esté en su poder y el nuestro para dar el apoyo necesario a todos los trabajadores posibles».
Liz Shuler, presidente de la AFL-CIO.
Por los momentos aún se desconoce cuando las negociaciones entre ambas partes serán retomadas, la última comunicación entre jugadores y dueños fue el jueves de forma informal, donde no surgió nada positivo de la misma. Podríamos estar al frente de uno de los parones cívicos más largos en la historia del béisbol y del deporte norteamericano.