Ya ha pasado bastante tiempo desde que Mookie Betts se mudó de la Costa Este a la Costa Oeste de los Estados Unidos, en un traspaso notable que envió al jardinero desde los Medias Rojas de Boston hacia los Dodgers de Los Angeles, y con el jugador ya estando bien establecido en la franquicia, Betts se tomó algo de su tiempo para aclarar lo ocurrido con la situación de su traspaso.
Vale la pena recordar que Mookie Betts rechazó una oferta de 300 millones de dólares por una extensión de su contrato con los Medias Rojas ya que el jugador deseaba un contrato de más de 400 millones. No lo acabaría consiguiendo finalmente, ya que luego accedió a firmar por 12 años con los Dodgers en un contrato por 365 millones.
Tenían cosas de las que ocuparse. Estaban en una situación donde tenían que hacer lo que era mejor para ellos. No puedes estar molesto con alguien por tener que hacer lo que es mejor para él, cuando tu tienes que hacer lo que es mejor para ti.
Definitivamente no hay odio ahí. Chaim Bloom hizo un buen trabajo hablando, siendo directo y honesto e hizo que todo el proceso fuera bastante calmado. Apesta, pero forma parte de esto.
Mookie Betts a Rob Bradford de WEEI
Mookie Betts también se tomó el tiempo para hablar de los desacuerdos en cuanto a sus pretensiones económicas, mencionando lo siguiente.
Había una oferta sobre la mesa, y nosotros la rechazamos, y lo sentimos. Solo quería que me dieran lo que valgo. Justo como cualquier persona que vive, quieren recibir lo que valen. Prácticamente eso fue lo que pasó. Los números no concordaron, lo que es normal. Todo son cosas normales.
Solo tuvimos que ir por caminos separados. Como cualquier cosa, hubo mucha plática de que no me quería quedar, o esto, o aquello, o lo otro. Eso es falso. Solo son negocios. Es lo que es. No hay mucho que puedas hacer al respecto.
Los Dodgers estarán agradecidos de la decisión de Mookie Betts
Seguramente quienes más festejaron por la falta de acuerdo entre Betts y los Medias Rojas fueron los Dodgers, quienes adquirieron al jugador y este tuvo un impacto inmediato en la organización, siendo parte fundamental del equipo que ganó la Serie Mundial de la MLB para acabar con una sequía de 32 años.
La producción de Mookie Betts con su nuevo equipo no ha dejado nada que desear, con el jugador manteniendo el mismo nivel que le vio convertirse en una superestrella en Boston y ganar el premio MVP en 2018, y el equipo esperará que continúe así para hacer valer el gran contrato que firmaron con él.