Aaron Rodgers finalmente tomó una decisión sobre su futuro y decidió regresar para la temporada 2022 como el quarterback titular de los Green Bay Packers.
Según el reporte publicado por Ian Rapoport, de NFL Network, el mariscal de campo de 38 años de edad le anunció la decisión a la organización que lo hará ser el jugador mejor pagado en la historia de la NFL tras ofrecerle una extensión de contrato por cuatro temporadas y 200 millones de dólares.
Además, Rapoport informó que 153 millones de dólares serán garantizados, algo que juega a favor de los Packers para disminuir el alto impacto salarial que el antiguo contrato de Rodgers tenía sobre el espacio salarial de 2022 y que alcanzaba los 46.7 millones de dólares.
Esto le permite a los Packers darle un poco más de maniobra para negociar con el receptor preferido de Aaron Rodgers, Davante Adams, al mismo tiempo que les da flexibilidad para mejorar una que otra falencia dentro de la plantilla.
Con este contrato es prácticamente un hecho que el MVP de las últimas dos campañas de la NFL se retire con el uniforme de Green Bay, el único que ha vestido desde que debutó en el circuito, con 22 años de edad en el 2005, y con el que tendrá contrato hasta los 42 años de edad.
En 17 campañas con los Packers, 14 de ellas como titular indiscutido, Rodgers suma un anillo de Super Bowl en 2010, cuatro premios MVP, fue el Jugador Más Valioso del Super Bowl XLV, en 10 ocasiones ha ido al Pro-Bowl, cuatro veces ha estado en el equipo All-Pro de la liga y fue incluido en el equipo del Salón de la Fama de la era de 2010.
Aaron Rodgers y los rumores de cambio
Las últimas semanas habían sido un vendaval de rumores que colocaban a Aaron Rodgers en otros equipos interesados en sus servicios o incluso retirado, ya que esta opción también estaba siendo manejada por el mariscal de campo.
Previo al acuerdo informado por Rapoport, la organización que estuvo más interesada fue la de los Denver Broncos, equipo que parecía ser un destino ideal luego de que el coordinador ofensivo de Rodgers en los Packers, Nathaniel Hackett, asumiera el cargo de entrenador en jefe.
Sin embargo, en Green Bay seguían esperanzados en que el QB se decidiría por regresar con ellos y no por un movimiento de equipo. Algo que finalmente sucedió.
Junto a los Broncos sonaron otra organizaciones como los Pittsburgh Steelers, interesados en reemplazar a Ben Roethlisberger, y los Tennessee Titans. Todo esto luego de que la relación entre los Packers y Rodgers entrara en un deterioro desde antes de la campaña pasada, cuando este último habría pedido un cambio si no se mejoraban algunos aspectos del equipo.
Finalmente la organización parece haber convencido a su experimentado mariscal de campo, que seguirá brindando alegrías y espectáculos sobre el emparrillado del legendario Lambeau Field.